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Resumen
Desde 1985 iniciamos, con el apoyo del CINEP, una experiencia de recuperación de la historia de los trabajadores en varias ciudades colombianas. Teníamos la doble preocupación de: aportar académicamente al conocimiento del pasado de uno de los grupos sociales determinantes de la vida del país, y de colaborar en la reconstrucción de la memoria colectiva de los obreros de esas ciudades. Era un intento de hacer del oficio del historiador una práctica académica y democrática, acercando dos mundos temporalmente distanciados: el de los intelectuales y el de los obreros.
En este número de Controversia Mauricio Archila ilustra las características de los grupos obreros de Medellín y Bogotá, ciudades con lejano pasado que sufren un desarrollo como centros comerciales internos y luego industriales. Medellín fue pionera en desarrollo industrial mientras a Bogotá la favoreció su posición como capital político-administrativa del país. Sus grupos obreros conformados por artesanos, ferroviarios y trabajadores de la construcción y más tarde de la industria manufacturera debieron dar una lucha lenta y poco notoria para diferenciarse de los pobres con los que las elites los querían asimilar. Las prácticas paternalistas y la introyección de la disciplina capitalista de trabajo, hacen de los núcleos obreros de estas dos ciudades, elementos aparentemente más dóciles y controlados por la patronal, especialmente en el caso de los textileros antioqueños. Los obreros deben, en consecuencia, construir una imagen diferente de sí mismos para lograr tener una identidad propia.
Plabras Clave: Obreros, Memoria, Grupos sociales, Desarrollo insdustrial, Industria manufacturera, Bogotá, Medellin